jueves, 29 de enero de 2009

De fuera vendrán que de casa me echarán... o no!

Snake, como bien sabeis todos, es un callejero. Pero en el sentido más literal de la palabra. No sólo fue allí donde le encontré, sino que es el lugar donde más feliz se siente -si exceptuamos, claro está, mi sillón favorito, que lo es también suyo, y de Bonnie, así que andamos todo el día a la griesca a ver quién lo pilla primero. Y es que yo, que soy rara y egoista, con mis gatos siempre acabo cediendo. Así que, aunque mi espalda me mate y me muera de ganas por sentarme en “mi” sillón, si está en él uno de estos dos monstruitos, me jodo y me aguanto, y sigo sentada en la misma silla... -. El caso es que aunque hiele tanto que todo amanezca cubierto por un manto blanco, el minino TIENE que salir.

Decir que tengo complejo de Emilio es decir poco, porque hay días que poco más puedo hacer que abrir y cerrar la puerta cientos y cientos de veces. Quién dijo que yo no tenía paciencia?

Hace unos meses escuché en la terraza unos ruidos muy extraños. Salí a ver qué era lo que pasaba, porque mi intuición me decía que Snake tenía algo que ver en ello. Y en efecto, así era. Salí y me lo encontré acojonadito perdido con la espalda pegada a la pared mientras otro gato de dimensiones similares a las suyas (mi animalico ronda los 10 kilos) boxeaba con él. Decir con él es decir mucho, porque Snake a lo más que llegaba era a esconder las patitas en su tremenda barriga. No sin un puntito de vergüenza por su cobardía, saqué al gato invasor de nuestros dominios, como madre preocupada por la poca valía de su hijo al que le tiene que sacar siempre las castañas del fuego. Me encabronó bastante, la verdad, porque las peleas que tiene en casa con Chipie son épicas, y a veces parece que se van a matar... aunque sólo estén jugando y la única damnificada sea yo, que tengo que ir recogiendo los mechones de pelos que dejan por todas partes.

Ha pasado el tiempo y Snake ha ido haciéndose adulto. Ya no es el niño alocado que corría sin saber por dónde. Bueno, esto sigue haciéndolo, pero es que a este gato se le va mucho la pinza. El caso es que un día de estos volvió a aparecer el gato invasor. Con sus dos bemoles llego, escogió un lugar soleado de la terraza y decidió echarse a dormir la siesta. Snake, que estaba por allí paseando, no salió huyendo, sino que se dedicó a observarle. Se pasó un tiempo que a mí me pareció infinito haciéndolo. Poco a poco iba acercándose un poco más al invasor, con pausa, con mucha astucia (este gato piensa que puede pasar desapercibido, pero ya os digo que con su tamaño esto es poco menos que imposible), iba ganando posiciones. Y yo observando. Y el invasor miraba a Snake y luego me miraba a mí, y viceversa, como recordando aquella ocasión en que la mamá tuvo que socorrer al cachorro. Y Snake se acercaba. Y el invasor no se movía... hasta que observó que mi “hombretón” estaba demasiado cerca y decidió irse con el rabo entre las piernas. Recorrió toda la terraza maullando como si se le hubiera muerto la madre, que encogía el corazón escucharle. Mucho cuento es lo que tiene este bicho. Desapareció de mi ángulo de visión y vi cómo Snake recorría todos los lugares para encontrarle. No hubo forma.



Seguí con mis cosillas y a las dos horas, aproximadamente, el invasor había vuelto. Pero qué se le ha perdido a este tiparraco aquí?, pensaba yo aturdida. Dio un montón de vueltas hasta llegar al objetivo: el lugar más cálido de toda la terraza, que no es otro que la esquina de la misma, donde tenemos una enredadera que ahora son sólo palicos, pero que se pone preciosa en verano, y que ha sido guarida de ni sé ya los gatos. Boo dormía ahí antes de encontrarnos. Snake, al otro lado de un gran charco, le miraba con ojillos de envidia, porque a él también le encanta ese lugar y, cuando hace sol, se pasa allí horas tumbado, como si estuviera en Benidorm. Entonces se me ocurrió escribir este post, o más bien el título: De fuera vendrán que de casa me echarán. El reloj siguió a su ritmo y yo a mis tareas, y cuando salí a la terraza para ver cómo estaba la situación, me encontré a los dos pipiolos compartiendo solarium!! Así que tuve que añadir el “O no”, eso sí, con la alegría de saber que el gato invasor ya no acojonará más a mi Snake, que se está haciendo “un paisano”.

lunes, 26 de enero de 2009

Sentimentaloide

Ayer no fui al teatro, lo que me impide, siendo fiel a la realidad, comenzar este post como las ya famosas crónicas teatrales del Maestro Iago. Si a esto añadimos que lo que me trae a escribir esto es una obra teatral que todavía no ha visto la luz, es más, que ni siquiera ha sido ensayada, pensaréis (no sin un puntito de razón), que me he vuelto majara perdida. Tal vez. Sea como fuere, acabo de leer en El País que van a subir a las tablas una de mis novelas favoritas, la enternecedora historia de Bruno, el más famoso calabrés del mundo mundial, escrita en 1985 (algunos aún no habíais nacido) por José Luis Sampedro y que lleva por título La sonrisa etrusca. Una historia estremecedora, llena de ternura y puntos de humor que sólo puede haber escrito un genio. Uno de esos libros que te enganchan desde la primera frase, que te emocionan, que te hacen vibrar... con un protagonista que matarías por conocer. Amo a José Luis (escritor infatigable que ya ha pasado los noventa años... y que sean muchos más!) desde la primera vez que leí el libro, y es que alguien capaz de escribir algo así tiene que ser un ser necesariamente extraordinario.

No sé las veces que he leído las aventuras de Bruno y Brunetino, sí que han sido muchas, y cada vez que vuelvo a leerlo me vuelve a emocionar como aquella primera vez. Vuelve a arrancarme sonrisas y lágrimas a partes iguales (y soy de las que, cuando se emociona con un libro o una película o lo que sea, llora lágrimas como puños). Quizás ahora, con todo lo que ha sucedido en los últimos años, lo que pasa es que me he “apropiado” un poco del hilo de la novela y me lo aplico en lo personal. Quizás lo mucho que echo de menos no haber podido disfrutar de mis Abuelos como quisiera, o que éstos me parecen, tras los Padres, la figura más importante en la vida de un niño, tal vez porque veo cómo nietos que sí podrían disfrutar de sus Abuelos no lo hacen; quizás porque cada vez soy más sensibilona o quizás, en fin, porque cada instante son más las cosas que consiguen conmoverme, el caso es que este libro lo resume todo en uno, y nunca dejo de recomendárselo a todo el mundo.

En cierta ocasión nos invitaron a una boda en Alemania. Una de las primas del Costillo abandonó la soltería en una celebración francamente hermosa donde nos lo pasamos piruleta. Esto, direis, no viene al caso. Pero sí. No seais inpacientes. Lo que no viene al caso es que esa fue la primera boda en la que cogí un ramo... y tuvieron que llegar otros dos hasta que "me decidieron" a dar el paso. Al grano!! Los novios, que son un par de originales, pidieron a los invitados que les regalasen libros, pero no un libro cualquiera, ni siquiera pusieron una lista de los libros que les gustaría tener. No. Ellos querían que cada invitado les regalase su libro preferido (el del invitado, para que se me entienda). Lo pensé mucho, muchísimo de hecho, porque son muchos los libros que me han ayudado a ser como soy (para lo bueno y para lo malo), y al final decidí regalarles La sonrisa etrusca (a pesar de que los alemanes, obvio, no salgan muy bien parados en la novela), en Alemán, claro.

Y ahora esta obra maravillosa va a ser llevada al teatro y me alegra enormemente. No sé por qué todavía no la han llevado al cine, porque tiene potencial suficiente para eso y para más y los personajes tienen la fuerza suficiente como para interpretaciones de óscar (ahora que ya casi los tenemos en puertas). Para mí, claro, sería bastante más fácil hacerme con su dvd que asistir a la función. Así que sólo me queda cruzar bien los dedos, esperar que el proyecto salga adelante, y que el amigo Iago sea mis ojos durante la representación. Será un placer en cualquier caso!

Han visto la luz?

África, (así como otras regiones del planeta), padece desde hace siglos la “protección” del mundo civilizado. Primero fueron esclavizados, expoliados, saqueados... después llegó la descolonización, trazando mapas de fronteras tan rectas que parecen imposibles y, cuando la conciencia (que tenemos, aunque pocas veces le hagamos mucho caso) dijo que ya estaba bien empezaron las ayudas humanitarias. El tema es cualquier cosa menos simple y no pretendo hacer aquí una tesis acerca del mismo. Son meras pinceladas que otros, más sabios y preparados que yo, podrían desarrollar. Esta mañana leía un artículo en El País que precisamente hablaba de todo esto.

Siempre he pensado que las cosas no se hicieron bien, ni antes ni ahora. Que es imposible que si todo ese dinero que se envía llegase a las personas que lo necesitan y en la forma en que lo necesitan, no debería haber ni una sola persona en el mundo que padeciese hambre. Menos aún que pudiera morir por ello.

Desde Europa y América se envían miles de toneladas de ropa y calzado. Después llegas allí y te enteras de que esa ropa se vende en los mercados y se te revuelven los higadillos. Si no tengo para comer... voy a gastarme el chavo que no tengo en unos zapatos? Tampoco ayuda mucho la panda de mangantes que suelen gobernar estos países, que no hacen sino reproducir el papel que hicimos los “blancos” en su día: llenar sus bolsillos a costa de lo que sea.

Aquella máxima tan simple y tan sabia pronunciada por Tagore de “no des un pez a un niño, enséñale a pescar”, parece que ha pasado desapercibida para las grandes autoridades que gobiernan este manicomio redondo. Tampoco la mayoría de las ong’s han hecho mucho hincapié en ello. A mí, desde luego, me parecía obvio. Cuando el pasado septiembre fuimos a África, sin hacer estudios ni calificaciones, sin investigar pues no tenemos ni idea de todas estas cosas, pudimos observar la inmensa riqueza de esa tierra, tanta, que yo, que soy un poco bruta, le decía al Costillo: “Aquí te comes un tomate, te tiras un pedo, y plas ya nació la planta!”. Falta agua, faltan medios, faltan aperos, faltan muchísimas cosas, pero tienen lo principal: buena tierra y muchas, muchas, muchas manos para trabajarla. Les faltan los medios y conocimientos para hacer que esa tierra produzca los alimentos que necesitan. Y pensé de nuevo: cómo es posible que con una tierra tan sumamente fértil esta gente pase hambre??

Parece que se ha hecho la luz, y ahora los que manejan el cotarro se han dado cuenta (ya era hora!) de que las cosas se están haciendo mal: que el dinero que se envía hay que enviarlo de otra forma, para otros fines, que no es suficiente con enviar sacos de trigo o leche en polvo. Igualmente se están planteando el revisar la calidad de esas ayudas. Necesitará algo más que una revisión el tema del comercio justo, así como a qué productos dedicar sus explotaciones. Si siguen haciéndolo de cara a la exportación seguirán estando jodidos, bien jodidos, porque el dinero que esas exportaciones conllevan no va a parar a las manos de los que trabajan.

La gran crisis financiera que nos tiene a todos temblando no es nada comparado con lo que allí sucede, porque la preocupación básica no es no poder pagar la hipoteca, no poder cambiar el dvd o comprarse un coche más grande. La preocupación extrema de estas gentes es qué voy a comer mañana. Lo peor es que esta crisis nuestra la pagarán también en ellos. Ojalá las cosas cambien, parece que al menos, las intenciones lo están haciendo.

Otro de Noeeeee!!!

Esta Noe es un solete y no sé si lo sabrán en su casa. Si no lo saben, desde aquí se lo digo: Su hija es un sol!!!! Siendo adicta, como soy (llegando incluso a envidiar algunos premios que veo pululan por ahí y nadie tiene el "detalle" de regalármelos...), a los premios, la verdad es que en esta chica he encontrado al "camello" perfecto porque cada poco me aparece con la dosis que necesito para mantener el ego en forma. Ya no sé ni cuántos son los premios que me ha dado, pero este me ha hecho una ilusión especial. De un lado porque es precioso, y de otra porque estando liada como está con los exámenes y con todo lo que eso conlleva, ha sacado tiempo del sueño para otorgarlo. Con los días que me ha dado mi santa espalda y con otras cosas llenando mi cabeza de mal rollo, el premio ha conseguido ponerme una sonrisina en la cara, y eso no tiene precio. Ella (léase, mi señora espalda) está bastante mejor, aunque seguirá dando guerra, que parece que es lo único que la motiva.

Gracias a todos por preocuparos y por pasar por aquí.

jueves, 22 de enero de 2009

Estoy pochina

Llevo ya tres días con un tremendo dolor de espalda que me trae a malvivir. Los días (pastillas y corsé mediante) son soportables pero las noches un infierno, así que estoy cansada, malhumorada y no tengo ganas de "ná". Ni siquiera de postear, aunque he intentado ir siguiendo lo que publicais vosotros, para que no se me acumule el trabajo.
Es por ello, oye, que os dejo un chistecillo (aunque seguro que muchos ya lo conoceis, pero es que me río cada vez que lo leo) para que no os olvideis de mí y para que vosotros, que podéis, os hagais unas risas (el dramatismo es uno de mis rasgos característicos, por si había dudas).


Ahí queda eso:

El nuevo padre de la parroquia estaba tan nervioso en su primer sermón, que casi no consiguió hablar. Antes de su segundo sermón, el domingo siguiente, preguntó al Arzobispo cómo podía hacer para relajarse. Éste le sugirió lo siguiente:

"La próxima vez, coloque unas gotitas de vodka en el agua y va a ver que, después de algunos tragos, va a estar mas relajado".

El domingo siguiente el Padre aplicó la sugerencia y, en efecto, se sintió tan bien, que podía hablar hasta en medio de una tempestad, totalmente relajado. Tras el sermón, regresó a la sacristía y encontró una nota del Arzobispo que decía lo siguiente:

Apreciado Padre:

La próxima vez, coloque unas gotas de vodka en el agua y no unas gotas de agua en el vodka.

Le anexo algunas bservaciones para que no se repita lo que vi en el sermón de hoy:

a. No hay necesidad de ponerle una rodaja de limón al borde del Cáliz.

b. Evite apoyarse en la imagen de la Virgen y mucho menos abrazarla y besarla.

c. Existen 10 mandamientos y no 12, los apóstoles eran 12, no 7 y ninguno era enanito.

d. No nos referimos a nuestro señor Jesucristo y sus apóstoles como" J.C. y sus boys".

e. David derrotó a Goliat con una honda y una piedra; nunca se lo folló.

f. No nos referimos a Judas como "puto cabrón de los cojones".

g. No debe tratar al Papa como "El Padrino".

h. Bin Laden no tuvo nada que ver con la muerte de Jesús.

i. El agua bendita es para bendecir y no para refrescarse la nuca.

j. En el ofertorio los fieles entregan el diezmo voluntario; quite el letrero que decía: "su propina es mi sueldo".

k. Los pecadores se van al Infierno y no " a tomar por el culo".

l. El padre nuestro se debe rezar alzando las manos al cielo y no haciendo la ola.

m. La iniciativa de llamar al publico para bailar fue buena, pero hacer el trenecito por toda la iglesia, ¡NO!.

IMPORTANTE: Aquel sentado en el rincón del altar, al cual Ud. se refirió como "maricón" y "travestí con faldita", era yo!!!!!!!!!!

Espero que estos fallos sean corregidos el próximo domingo.

Atentamente,
El Arzobispo.

martes, 20 de enero de 2009

Elfstedentocht

Los holandeses son una raza aparte. Si desconocíais este dato, aquí estoy yo para informaros. Esta idea rondó mi cabeza la primera vez que puse un pie en este país, y ha sido confirmada en los años que llevo viviendo aquí. Quizás una de las muestras más, digamos, ejemplares de ello es la Elfstendentocht, o Tour de las once ciudades, que la pasada semana cumplió 100 años de Historia, con mayúsculas. Cuando las condiciones climatológicas lo permiten (que no es siempre, de hecho hace doce años que se celebró la última edición) y la consistencia del hielo es la adecuada, miles de personas (profesionales y aficionados) acuden a Friesland, al norte del país, para disputar una carrera sobre los canales helados que, a temperaturas glaciares (decían que en la última edición la sensación térmica alcanzaba casi los 30 grados bajo cero), les llevará a recorrer doscientos kilómetros para llegar a la meta.

Pero vayamos por partes. Una comisión organizadora, formada por diferentes ijsmeesters (o maestros del hielo de las diferentes ciudades por las que transcurre la prueba) se encarga de comprobar el grosor del hielo, las condiciones metereológicas, los pros y los contras... y finalmente tomar la decisión de si puede celebrarse o no la carrera. No es una cosa baladí: cada ijsmeester es responsable de su zona, y de lo que allí pueda suceder. Para participar es necesario ser miembro del club y sólo los inscritos antes de 1985 tienen garantizada su participación. Y es que el número de personas que sueñan con realizar esta loca aventura es increible y no hay lugar para todos.

Los ijsmeesters van midiendo durante días la densidad que alcanza la capa de hielo, toman sus notas, se reunen, hablan sobre ello. Lógicamente, el hielo no tiene el mismo grosor en todas partes y existen zonas (por ejemplo debajo de los puentes) en las que no alcanza la medida suficiente para soportar el peso de tanta gente. Qué hacer entonces? Pues muy sencillo (una vez que lo has visto hacer, claro), cortan bloques de hielo de otras zonas y los trasladan hasta allí. Las fuertes heladas se encargarán de unirlos. En otras ocasiones, los patinadores tendrán que atravesar pequeños tramos por plataformas de madera, intentando no esmoñarse, para regresar de nuevo al hielo.


Miles y miles y miles de personas acuden a la convocatoria. En la última edición fueron 16.000 los participantes. Y a esto hay que añadirle el porrón de gente que acude “sólo para ver” el espectáculo. Como todo depende del clima, la organización debe tener todo listo en cuestión de días. Si no recuerdo mal, en el 97 se tomó la decisión un miércoles y el sábado fue la carrera, concretamente el 4 de enero de 1997. En ese año las heladas comenzaron el 20 de diciembre y continuaron hasta esa fecha, lo que permitió que se diesen las condiciones idóneas para poder llevarla a cabo. La última vez había sido en 1986. Demasiado tiempo para tanta afición. De ahí que no extrañe ver imágenes en los que la gente canta, baila y disfruta como un niño... policías incluidos, que fue un descojone verlos danzar.


A lo largo de la prueba hay diferentes puntos de control por los que tienen que pasar los participantes para que les pongan un sello (como la estampita compostelana, vaya) y los hay que son por sorpresa. Si llegas a la meta sin uno de los sellos... es como si no hubieras llegado. Y eso le pasó precisamente a uno de los que llegaron en el grupo de cabeza en el 97. Que es como para tirarse de los pelos. También puede pasar que vayas a la cabeza y cuando estás viendo la meta tan cerca que la puedes tocar con la punta de tus dedos, llegue otro más rápido que tú, se marque un final apoteósico y te quedes con dos palmos de narices y un segundo puesto que sabe a derrota.


Realmente son dos pruebas: una para los profesionales, que empieza a las tres de la madrugada. Y otra para los aficionados. Encerrados en una gran nave esperan ansiosos a que se abra la reja que marca el principio de la carrera. Tras correr unos metros, llegarán al lugar en el que cambiar su calzado por los patines y comenzará, de verdad, la aventura. Una aventura que dura doscientos kilómetros atravesando zonas desiertas en total oscuridad. Justo para mí, vaya. Durante esos tramos los corredores intentan permanecer en grupos y es espectacular viéndoles en fila uno tras otro, como un ballet perfectamente ensayado.


Los ganadores de 1997 fueron Henk Angenent, entre los hombres y Klasina Seinstra, en mujeres. Si ya la prueba es absolutamente inhumana, imaginaos lo que debió ser para Klasina que, además, estaba embarazada. Y es que la que vale, vale para todo! Aunque quizás más que las historias personales de los profesionales, llaman la atención las de los aficionados. En un programa que emitieron la semana pasada contaban algunas de ellas. Como la del “jefísimo” de la Shell, que al enterarse por la radio de que se celebraría la carrera, puso su culo en el avión (no sin problemas, pues había lista de espera... pero el piloto, de KLM, claro, intervino y hubo un sitio para él) desde Texas (donde vivía) hasta Amsterdam. Una vez allí se dirigió a La Haya, a por sus patines, y desde allí a Friesland, lugar al que llegó seis minutos antes de que se terminase el plazo de inscripción. Consiguió terminar la carrera y lo contaba con un orgullo apenas contenido. Días después, ya en USA de nuevo, tenía una reunión y, como no podía soportar el dolor de pies, estaba descalzo. En un momento dado, fue al wc y uno de sus compañeros le preguntó qué le sucedía. Nada, que he estado patinando en el hielo, dijo él. Y el otro: anda, pues en tu país han hecho este fin de semana una carrera de idiotas patinando por los canales. Él sólo dijo: Yo era uno de esos idiotas.

Otra mujer de las que apareció en el programa tuvo una grave caída en la que se partió la nariz (durante la prueba). Los médicos de campaña la atendieron y le prohibieron (ante su insistencia) regresar a la prueba. La trasladaron a un hospital. Desde allí se las ingenió para volver.... y finalizar la carrera con éxito. Todos lo cuentan, con orgullo contenido, como una de las mayores experiencias de su vida. Pero no para todo el mundo es una experiencia grata, pues a las doce en punto de la noche se termina el plazo para llegar a meta. Si llegas un segundo más tarde estás jodido, y bien jodido, porque a pesar de haber realizado la prueba en su totalidad, te quedas sin medalla. Una medallita, más bien, que apenas es mayor que la uña de mi pulgar (y mi pulgar es pequeño). Contaban en el reportaje la historia de un chico que no pudo terminar la prueba (son muchos los que no lo consiguen, como os podeis imaginar) y un "veterano" le regaló la medalla que había conseguido hace unos años, probablemente conmovido por las lágrimas de frustración y pensando que, quizás cuando él faltase, su familia no apreciaría el trofeo tanto como aquel joven.

Aquí podeis ver la llegada a meta en 1997

Y aquí un montaje que alguien colgó en youtube con motivo de la conmemoración de los 100 años de historia del evento.


Aunque estéis liados, os recomiendo ver los vídeos, porque de verdad es algo que merece la pena.
* La empanada mental de la que hago gala normalmente parece tener vida propia. Ya está arreglado el cambio: no son siete, sino ONCE las ciudades. Ains.

lunes, 19 de enero de 2009

Gañan!!

Qué cabeza la mía! Había olvidado contaros que Miguel y Ana han hecho una gala de premios estupenda y generosa en la que han tenido a bien conceder premios a todos sus lectores, entre los cuales estoy incluida. No sé muy bien si fue primero el huevo o la gallina. Vamos, que no recuerdo si primero les visité yo a ellos o fue a la inversa. Lo que sí tengo claro es que nos conocimos gracias a Iago. Y es que este chico siempre anda metido en mi vida blogueril. Bien metido y bienvenido, ojo, no se me interprete mal. Gracias a él he conocido a personas estupendas, como lo son Ana y Miguel. Por él supe, a la vuelta de vacaciones, que nuestros amigos se habían casado. Y me enteré del nombre de la preciosa bebé que esperan, Claudia. Son muchas más las cosas que nos unen que las que nos diferencian y he llegado a reirme tanto con los post de Miguel (especialmente aquellos en los que, al más puro estilo abuelo cebolleta, recuerda su infancia... que se parece en muchas cosas a la mía) que no sé cómo he podido sufrir este olvido. En fin, chicos, que un millón de gracias por vuestra generosidad y que, con el permiso de Boo, Chipie y Snake, dejaré que un lindo perrito (o perrazo, porque tela con vuestro amigo!!) campe a sus anchas por mi blog. Espero, eso sí, que no les haga nada a mis pequeños, que sino la tenemos!

gracias!!!

viernes, 16 de enero de 2009

La vie en rose



El día ha amanecido, como tantos otros, con una luz especial.
Las nubes se han teñido de rosa... tal vez sólo para mí.


Ni mis cualidades ni las de la cámara han permitido que las fotos sean mejores, pero me apetecía compartirlas.

Que tengais un buen día!

jueves, 15 de enero de 2009

La Blogohistoria

... o el meme que me ha enviado David, del blog Tertulias para Perogrullos. Este es mi post doscientos (284 si añadimos los de mi otro yo) y había pensado escribir sobre otra cosa. Pero una de las cosas más grandes que tiene esto de los blogs es el compartir y el arrimar el hombro del que hablábamos ayer, así que he decidido que qué mejor homenaje (a mí misma, of course) que contribuir con mis desvaríos a la obra de un gran bloguero. Así que... este será el último meme que hago por unos meses (por favor, tened piedad de mí, y yo la tendré con vosotros).
Las reglas:
  1. Cada persona pondrá el nombre de su blog antes de la historia, en el listado de participantes, poniendo su número de participación (1-....2-....) haciendo así una lista con todos los que hemos colaborado.
  2. Enviará la historia a tres personas y se asegurará de que la hagan, cambiando los destinatarios si no les apetece a los seleccionados.
  3. Cada persona, añadirá entre 2 y 5 frases a la historia y se la mandará a otras tres y así sucesivamente.
  4. No se puede devolver el post a quien te lo envió.
  5. Y si te vuelve a tocar, no se la puedes enviar a las mismas personas, búscate otras.
  6. Cada vez que se sumen 50 colaboraciones en el listado de participantes, el que le toque esa cifra, deberá enviar la historia a esta dirección de correo electrónico: davy_gz@hotmail.com
  7. Si tenéis alguna duda ya sabéis donde localizarme.
  8. No os olvideis de copiar las normas, el listado de participantes y la historia, por supuesto.
  9. Y la última, si esto sale bien, dentro de no mucho tiempo, tendremos una historia magnífica hecha por todos nosotros y que enviaré a cualquiera que me la pida. El culpable de la idea es:http://www.tertuliasparaperogrullos.blogspot.com/

Listado de participantes:

La historia:

(David) Y le vi, allí estaba aquel desdichado, el mismo cuyo cuerpo había enterrado en aquel monte apenas hacía media hora, con su mirada de suficiencia, esa que tanto asco me daba, abriendo el Mercedes que había conseguido con mi dinero, el dinero que yo le había confiado. Había sido mi mejor amigo, pero ahora el sólo verlo provocaba en mí un odio indescriptible, por culpa de ese hijo puta habían comenzado todos mis problemas, por su culpa lo había perdido todo, y cuando creía que mi particular infierno había terminado, me lo encontraba allí, a unos metros de mí. Me puse aún más blanco de lo que ya estaba y sin apartar la mirada de su rostro subí a mi coche.

(Forgiven) Arranqué y puse la música a todo volumen. No quería volver a verlo, así que aceleré, como si así huyese de todo lo que le concernía, como si escapase de aquel origen de problemas que antes había llamado amigo. Y cuál no sería mi sorpresa al ver la matrícula del flamante coche en mi retrovisor, y una sonrisa maníaca en su cara. Decidí hacer algo que antes no habría hecho bajo ningún concepto. En una de las principales vías de la ciudad, me metí en sentido contrario, hasta la primera calle en la que pude girar. Lo había perdido, de momento.

(Bira) Y aún así decidí seguir luchando. Algo había fallado, pero el qué? Creía haberle golpeado con fuerza suficiente como para mandarle al otro barrio. De hecho el recuerdo de su sangre negra y repugnante brotabando de su sien todavía me revolvía el estómago. Había cavado una fosa bien honda y, tras arrojar allí lo que yo pensaba era su cadáver, toda la tierra del mundo cayó sobre él. Y ahora estaba detrás de mí!! Los recuerdos volvían a mi mente como los flasback de aquellas viejas películas que desde siempre me habían fascinado. Aquella sonrisa suya, tan superior, reflejada en el retrovisor me desconcertaba. Estaría volviendome loco?

Les paso el "embrollo" a

  1. Di, de La metafísica de los tubos.
  2. Luna, de El mundo desde la luna.
  3. Laura, de La vida gira.

miércoles, 14 de enero de 2009

Cambio de actitud!

Como sabéis, el día de ayer no fue de los mejores que he tenido. Tampoco de los peores, vive dior. Simplemente se juntaron una serie de pequeños detalles que me hicieron tener los cohetes más disparados que de costumbre. Mamá tenía hoy control con la hematóloga. Acabo de hablar con Papá y me ha dicho que por fin su hemoglobina va tomando los niveles deseados. Y me ha alegrado el día. Qué queréis que os diga, como se quiere a unos Padres... Rectifico: como yo quiero a mis Padres (que hay otros que tela marinera, pero ese es otro tema) es difícil querer a otra persona. Y saberles sanos (dentro de lo que cabe) es para mí la mayor lotería del mundo. Ni el gordo de navidad ni su santa madre podrían, ni aún uniéndose, alegrarme más que saber que mis Papis están bien.


Por si esto fuese poco (que ya os digo yo que no lo es), hoy me he sacudido la vagancia extrema que me tenía poseída y he desarrollado más trabajo esta mañana que en lo que va de mes. Y es que yo cuando me pongo, me pongo!! Pero, ahí no acaba la cosa. Acabo de recibir por correo un vídeo que me ha puesto una sonrisa estúpida (pero de esas que quisiera que todos llevásemos permanentemente) en la cara, y he querido compartirlo con vosotros. El vídeo me lo envía mi amigo Sacris y me ha transmitido una energía increible. He sacado mis propias conclusiones (bueno, tampoco hay que romperse mucho la cabeza para hacerlo, pero ya sabéis cómo soy) y he pensado en lo genial que sería el mundo si todos arrimásemos un poco el hombro, si cada uno de nosotros hiciese algo, aunque sólo fuese un pequeñísimo detalle por intentar mejorar la vida de los demás (y, con ello, la nuestra propia), en lugar de ir poniento piedrecitas (cuando no pedruscos) en los zapatos ajenos. Por qué no? Hoy quiero creer más que nunca que el futuro será benevolente y que si queremos, podemos tener un mundo mejor!!!



Si el haber puesto a Mario brincando de alegría en el post anterior algo bueno tenía que traer!

La foto es mía. Las flores de Mamá! Y la de Reagan, pues ya sabeis, de la peli El Exorcista, que muy amablemente me ha facilitado el amigo google.



Desde el blog de Casta, Casta Diva, me llega un meme más y con este ya casi estoy puesta al día (he dejado el más complicado para el final, pero eso será en el siguiente post, amigos). Leídos todos los post que el señor reader marcó para mí, sólo me falta cumplir con esos memes que quedan pendientes para tener hechos los deberes. Así que vamos a ello sin más demora.

LAS REGLAS:

1. Crear un vínculo con el que te ha echado encima esta maldición del tag, Casta dixit, y yo no le llevo la contraria, oigan, y poner estas reglas.

2. Compartir 7 hechos sobre ti mismo en tu blog, cositas raras y similares, amos, no cosas tipo desayuno antes de ir a trabajar.

3. Echarle un tag de estos a otras 7 personas, con su nombre y vínculo a su blog.

4. Avisar a los afortunados con un comentario en su blog… ¡YOU HAVE BEEN TAGGED!

5. Si no tienes 7 amigos con blog, o alguno de ellos ya ha sido tagged, pues a repartir entre 7 blogueros que no conozcas. Aquí se me ocurre otra opción: si ya has enviado memes a casi todos tus amigos, o al menos a todos aquellos amigos que crees que lo harían (por eso se lo enviaste), elige 7 blogueros a los que no hayas visitado nunca, que así de paso, conoces nuevos blogs (claro que no sé yo si enviar un meme como primer comentario será la mejor tarjeta de presentación, pero esa es otra historia).


LAS 7 INTIMIDADES

1. Soy maniática. Así, dicho sin contemplaciones. No puedo soportar que en el armario los ganchitos de las perchas miren cada uno para un lado. Me pone de los cohetes perdida. Tienen que estar todos en la misma dirección y ésta, obviamente, tiene que ser con el ganchito hacia el interior del armario. No sé si la manía me viene del pánico al fuego (que se lo tengo, y con esta confesión casi tendríamos dos y mi teoría de que es más fácil vaciar un armario así) o de dónde, pero ahí está.

2. Puedo ser muy adicta, que no adictiva, y las cosas que me enganchan van desde el tabaco (que me tiene cogida por los...) hasta los videojuegos, pasando claro está por seriestv y mil pequeñas pijadas más. Con toda la pinta de señora mayor que tengo para algunos, puedo pasarme horas y horas dándole a la maquinita. El último ejemplo fue un viaje de cuatro horas y pico en autobús en el que mi mejor compañía fue Mario. Hasta se me hizo corto!!

3. Guardo cartas y postales de amigos y novietes desde hace siglos. Apenas las releo nunca, pero me gusta tenerlas. Echo de menos esa época en la que al ir a recoger el correo te encontrabas algo más que letras del banco, facturas o publicidad. Eso no me parece grave. Hubo una época en la que guardaba (en una libretita) los sms que me llegaban y hasta los que enviaba yo!

4. También guardo mil pequeñas cosas inservibles, que jamás volveré a utilizar, pero nunca se sabe. Mamá y el Costillo dicen que terminaré con el síndrome de Diógenes. Yo no digo ni que sí ni que no, pero sigo guardando...

5. Aunque no soy la persona más ordenada de este mundo (tampoco es esto un caos, eh), no puedo aguantar entrar a un wc y que el papel no esté colocado de la forma correcta*. Si es en una casa donde no tengo mucha confianza hago mis cositas rápido y me voy. Si hay confianza, antes de hacer “nada más” coloco el rollo... a ver si se dan por aludidos y no tengo que pasar esos atracones la próxima vez. Que soy maniática lo había dicho, no? * Para los que tengais dudas, la forma correcta de colgar el papel higiénico es la que se ve en la imagen, nunca al revés.

6. Me da pánico el dolor y sólo pensar en él me produce pesadillas, sarpullidos y ataques de pánico. No quiero sentir dolor nunca.

7. Aunque lo hago con frecuencia, odio dejar las cosas a medias. Empezar algo (por pequeña que sea la tarea) y no terminarlo me saca de quicio. Es un vicio que intento corregir. Lo de dejarlo a medias, no lo de odiarlo.

Y hasta aquí llegamos con la parte “fácil”.

Los candidatos a meme (si no lo haceis lo entenderé, porque vaya racha de memes tenemos, oigan) son:
  1. Anselmo, porque estoy segura de que sus respuestas me arrancarán carcajadas.

  2. Ana y Miguel, por la misma razón y como agradecimiento (que un meme no es un cosa tan mala, hombre) por el hermoso premio que nos dio a todos sus lectores ayer.

  3. Noelia, porque sé que le encantan estas cosas

  4. Jaac, porque jamás le he visto hacer algo de esto, y si consigo que lo haga podré llegar a dominar el mundo (como Sufur, pero a lo jenny)

  5. Di, para que tenga tarea cuando vuelva, o sea mañana. Bienvenida, Di!!!

  6. McVicta, para ver si vuelve pronto y deja de pretender ganar el cielo (o mucha pasta) y publica algo... que hace una semana de su último post.

  7. Weblara, por saber si esta bella persona tiene alguna cosilla que esconder :P

Imágenes bajadas de sangoogle, of course!

martes, 13 de enero de 2009

Se me llevan los demonios 2!!!

Me he despertado a las seis menos diez de la mañana (de mala hostia, por si alguno tiene dudas). Tras intentar dormir y no conseguirlo, me he levantado cuando aún no eran las siete (aquí la mala baba ya me hacía parecer un ser diabólico llegado de otro planeta con ansias de venganza y con intenciones de cargarse a todo bicho viviente). He leído algunas noticias en un par de periódicos y el coraje parecía no tener límites. Me dije: “Así no se empieza un día, no, no, no. Mejor pásate a hacer una vuelta por los blogs amigos, especialmente por el de esos amigos que TODAVÍA no has visitado tras las vacaciones de Navidad, bonita. Que ya te vale!”. Y a eso me he puesto. Pero oyeeeeee, fíjate tú, todas las putas páginas de internet cargaban menos las de blogger y yo ya empecé a notar que se me hinchaban los cohetes. Y de qué manera!!


Reader me avisaba que me faltaban SÓLO 45 temas más por leer para empezar a tener una vida bloguera normal, y no a la desesperada (yo es que soy un poco estúpida y me siento fatal cuando alguno de los bloguers que todavía no he ido a visitar me comenta), en esta lucha continua contra el reloj. Así que, desde que he vuelto de España he ido a la desesperada leyendo, leyendo y releyendo incluso algunos (porque llega un momento en que la mente se atora del todo y ya no sabes ni lo que te traes entre manos) los post que habeis escrito en mi ausencia y los que vais publicando en estos días. Bah, unos prácticamente quinientos post de nada (lamadrequeosparió!). (la imagen es pésima, pero yo no sé hacer capturas de pantalla y además, la hice a la prisa corriendo... no os estoy diciendo que voy pillada de tiempo?).
Decidí que nada ni nadie me iba a joder más el día, y menos un fallo técnico (últimamente no sé si es mi ordenador o blogger, aunque afortunadamente me inclino por esto último, pero los fallos técnicos como que se producen con una frecuencia mayor a la deseada, que es cero!). Así que, no reirse please!, me he puesto a leer los post que faltaban en el reader, haciendo los comentarios en word... Y en eso estoy. He bajado la barrera psicológica de los treinta post!!
Después he ido al gimnasio, a sudar como una cerda y a encabronarme aún más. Casi lo consigo. Pero faltaba la guinda. Costillo me había dicho que hoy llegaría un paquete para él. Ok. No problem. Pero el muy capullo del cartero (que nunca pasa temprano cuando le estoy esperando) qué ha hecho hoy? Pues nada, con dos cojones, aprovechar a traer el paquete JUSTO cuando yo no estaba. Y no es que me moleste especialmente (el paquete no es para mí), pero es que requetecontraodio ir a la oficina de correos, que está a cinco minutos de casa, pero que a mí me da la sensación de que es como ir en dirección errónea. No sé explicar lo que me pasa, pero me pone de los cohetes tener que ir allí. Y no me queda otra. Claro que tendrá que ser mañana, porque hoy el paquete lo tendrá todavía el "amable" cartero.
Ahora, un poco más despierta y algo (no mucho) más relajada, me he dado cuenta de que es martes y trece y me he dicho que a mí plin, que el los caprichos de calendarios y supersticiones tampoco vendrán a joderme, y que hoy será un buen día sí o sí!!!!
* el título y la imagen (que me encanta, porque soy yo tal cual), los he tomado de otro día de furia

domingo, 11 de enero de 2009

Del aviso y la traición

Dice el refrán que el que avisa no es traidor (de ahí el título presuntuoso del post). Y yo, pecadora donde las haya, tengo muchísimos defectos, pero el de ser traicionera no se encuentra entre ellos. A qué viene todo esto? Voy a confesar lo inconfesable? No, no, no os asusteis. Sólo voy a hacer otro meme, que ya os había dicho que me han nominado a varios. Este me lo envía mi gran amigo Alber, del blog Gay sin ley. Un fantástico blog lleno de glamour y de mil historias contadas desde el sentimiento y la sinceridad de una bellísima persona. Con el cariño que le tengo y el que él me demuestra cada día, no podía hacer otra cosa que ponerme al meme, al que por cierto había perdido la pista, pues fui nominada allá por el 12 de diciembre... del año pasado (uy, uy, uy cómo suena esto, no?). En fin, que allá vamos!

1. Coge el libro más cercano, abre la página 18 y escribe la cuarta línea.

"primer aniversario de nuestra boda. Viajábamos a la ciu-“.

Esta sería exactamente la cuarta línea del libro, pero supongo que será algo más comprensible si escribo la frase completa, no? Dice así:

“Nuria me mató, o la maté, antes de que se cumpliera el primer aniversario de nuestra boda. Viajábamos a la ciudad de mi infancia, para rendir una de esas periódicas visitas que tanto congratulaban a mi madre, y que incluso mi padre, más esquivo o displicente, aguardaba con expectación, conquistado también por la efusividad de Nuria”.

Pertenece al libro “El séptimo velo”, de Juan Manuel de Prada y es lo que estoy leyendo ahora. Bueno, ahora no, que ahora estoy al ordenata, ustedes me entienden.


2. Cuenta lo último que viste en la tele.

Hoy todavía no he visto nada, bueno sí, el Costillo y su hermanísimo estuvieron viendo un concierto de los Rolling y yo le eché una ojeada. Lo último que vi en la tele fue ayer por la noche, los dos primeros episodios de la segunda temporada de Roma, que los compramos hace una eternidad y que no hemos podido ver todavía por falta de tiempo (vacaciones en medio y demás), pero que recomiendo encarecidamente, pues tanto la historia como los personajes, el vestuario, los decorados y demás son fantásticos.


3. Aparte del ruido del ordenador, ¿Qué se escucha en este momento?

Ahora mismo nada, el Costillo y los gatos duermen y lo único que escucho de fondo es el sonido de motores de los autos que pasan por la calle. Y ya es raro, porque normalmente siempre estoy escuchando música, pero hijo, hoy me has pillado. Casi mejor, porque a lo mejor no compartimos gustos musicales, jeje.



4. Algo que los blogueros no sepan de ti.

Son demasiadas las cosas que no se saben de mí. Algunas hasta las desconozco yo misma. Quizás que no soy tan payasa como parezco y que puedo tener un humor de los mil demonios, que por las buenas soy muy buena pero por las malas soy lo peor. Aunque esto ya lo vengo diciendo desde que blogueo (Conxa sigue sin creerme, pero esa es otra historia).


5. ¿Qué proyecto tienes entre manos ahora? ¿Qué material te gustaría probar?

Tengo muchos proyectos y una sola cosa segura: no cumpliré ninguno. Así soy yo. Hago mil planes, incluso hasta disfruto haciendo unos plannings monísimos de la muerte, que termino por incumplir a los dos días (con suerte). Así que este año he dejado todo correr y me he propuesto sólo uno: intentar ser feliz y transmitir esa felicidad a los míos. Teniendo en cuenta que no creo en la felicidad absoluta, digamos, que el proyecto es titánico, pero es que nunca he creído en eso de ponerse pequeñas metas (quizás en mi incredulidad esté el fallo y así es como me luce el pelo).


Con el objetivo cumplido, lo único que me falta es pasárselo a OCHO BLOGUEROS, pero paso, de verdad que paso, porque todavía tengo más memes por cumplir y al final me vais a coger manía. Así que simplemente lo cuelgo y el que lo tenga a bien, que lo haga. Para mí será un placer leer vuestras respuestas.


Las imágenes las he tomado prestadas de sangoogle

sábado, 10 de enero de 2009

El tercero

Una de las cosas que tiene esto de vivir “en el extranjero” es que no te enteras de la misa la media de ciertas cosas que suceden en tu país. Aparte de perderte el día a día con las personas que más quieres y de ver crecer a los hijos de los amigos, hay un millón de pequeños detalles que se nos escapan. No quiero entrar en temas profundos, así que al grano! Hace un año (o más) me llegó un mail de esos que son un montón de fotos con frases más o menos acertadas. Hablaba de un tal Duque y ese día me cagué en la república y adoré la aristocracia, pensando en el sueño que sería que todos los aristócratas estuvieran como aquél. No sabía quién era ni a qué dedicaba su cuerpo serrano. Por otro lado, me llegó (algún periódico que otro leo, no creais) la noticia de una gran controversia debido al título de una “nueva” (hablo de hace tiempo, eh) serie de Telecinco. No me sorprendió mucho, porque parece que la cadena tiene que sembrar polémica para recoger frutos, digo, audiencia. El título en cuestión me pareció de un gusto más que dudoso, especialmente pensando en todas aquellas mujeres que han padecido un cáncer de mama, pero también pensé (es que pienso mucho) que tampoco era para tanto. Que llevaba ese título como podría llevar cualquier otro. Además, si era una copia de una serie que se había escrito con ese título, porqué cambiarlo? No volví a tener noticias del tema.

De vez en cuando, en mis viajes a la madre patria (cómo suena esto, por dior) oía algún comentario acerca del Duque y de “Sin tetas no hay paraíso”, pero como no había visto ni un minuto de la serie no me enteraba de nada y seguía a mi rollo.

Este año (yo siempre a la última, oigan) tuve la grata sorpresa de poder ver varios programas o series españoles a través de internet. Y me dije, oye, pues si tanto hablan de la serie, podría echarle un vistazo. Aunque sea mala (o peor), me alegro la vista viendo al Duque, que si en fotos está cañón en movimiento puede ser un bazoka! A ello me puse y la verdad es que sin ser la serie de mi vida me enganchó de tal forma que me la vi del tirón. Vamos, que vi las dos temporadas en menos que canta un gallo y hoy (concretamente hace diez minutos) he visto el último capítulo. Los de Telecinco han tenido el acierto de hacer dos finales, uno feliz y otro trágico. Les faltó un tercero: el que habría hecho yo, pero ese es otro tema. Como supongo que España entera ya lo sabe, no hago ningún mal diciendo que en uno de los finales muere el Duque. Este final me ha gustado, y es que partimos de que el macizo en cuestión interpreta a un narcotraficante sin escrúpulos con demasiados delitos (también de sangre) a sus espaldas, y a pesar de lo guaperas que es, de los modelazos que luce y del ritmo de vida que lleva, supongo (y así han debido suponerlo los de la cadena también) que no está muy bien visto fomentar en los jóvenes (y en otros sectores, pero los jóvenes siempre son quienes cargan con esta fama) este tipo de vida “fácil”. El final feliz no me ha gustado nada, de una porque no soporto a Catalina. No puedo con ese personaje. Que no digo yo que Amaia Salamanca lo actúe bien o mal. Quién soy yo para juzgar eso?! Sino porque el papel que hace me pone de los cohetes desde casi el principio de la serie. El colofón lo puso cuando, en plena huída pretende dejar a la Jessy (que me encantó) a su suerte y como si se la comen los leones (aunque leones no salen en la serie, no se confundan). De otra, porque estamos muy acostumbrados a que las películas y las series tengan un final feliz, y no está mal que a veces las cosas terminen como en la vida real: chungas!. A pesar de todo, para mí el final perfecto habría sido o el primero, es decir, la muerte del Duque u otro en el que el merendable protagonista se diese cuenta de que Catalina es una interesada, pija e hipócrita que no le conviene y se larga a seguir haciendo de las suyas con la Jessy. Como música de fondo podrían poner el “No cambies, no cambies, no cambies” de la artista sin nombre (que no es Prince). Que no?




* las imágenes del post pertenecen a la página de Telecinco.

De los memes


Mi adorado Sufur ha explicado mucho mejor que nadie lo que es un meme. Yo, que soy bastante más simple, me limito a rellenar los que me son enviados, con más o menos gracia, mayor o menor acierto. En mi ausencia navideña me han caído unos pocos, así que paciencia, hermanos!! Este me lo ha pasado Noelia, del blog El rincón de los sueños. Y es el primero que hago porque viene con premio!! Soy una mugrosa egoísta y tuberculosa. Es lo que hay. El primer requisito es subir la imagen. Eso está hecho. Aparte, por supuesto, luciré al simpático vampiro (que ya había visto en otros blogs, no sin sentir cierta envidia, todo hay que decirlo) en la estantería de premios!

Además tengo que compartir con vosotros tres cosas que nunca he hecho, pero que me gustaría hacer. Veamos, la lista podría ser infinita, pero voy a ser simple, que es fin de semana y tampoco conviene romperse mucho la cabeza:

1) tirarme al Duque o, en su defecto, a Brad Pitt. Este orden ha cambiado, porque mi Braulio siempre me ha tocado mucho la fibra. Pero es que su unión a la Jolie, que no la soporto, y la defensa del producto nacional han podido, así que me quedo con ese pedazooooo de Duque!!














2) Dar la vuelta al mundo, sin prisas, con mucha calma y la tarjeta a reventar de billetones, sin privarme absolutamente de nada. Estar un mes aquí y otro allá disfrutando de todas las maravillas que encierra este planeta. Lo de viajar al espacio lo dejo para otros, más adinerados y aventureros. Yo me conformo con lo que la Tierra nos ofrece. Que no es poco!!


3) Grabar un disco y convertirme en la number one o más! Porque yo lo valgo.

Además debo hacer una mini lista, de tres puntos, de cosas que nunca haya hecho ni haría:

1.- Matar a alguien. Esto es casi de lógica, a pesar de tener una dialéctica un tanto agresiva a veces, me considero una persona pacífica y no me gustaría tener que verme en la obligación (léase legítima defensa o similar) de tener que darle boleto a alguien. O, ya que estábamos con el Duque, de mandarle a comer gladiolos, que diría Morón, juas juas.

2.- Vender a las personas que quiero. No tienen precio y no me gustaría llegar al extremo de tener que ponérselo. No obstante, si eso sucediera, me encantaría negarme con la cabeza muy alta y el amor hacia ellos no sólo intacto, sino fortalecido.

3.- Puenting. Aunque hubo una época en la que habría sido capaz de hacerlo, ahora con mis frecuentes ataques de vértigo me entran mareos sólo de pensarlo. Ya no soy capaz ni de verlo por la tele y con eso lo digo todo.

Por último debo endiñarles este meme (premio incluido, por supuesto!!) a seis personas y avisarlas para que tengan a bien hacerlo (o les corto las manos, jaja).

Mis seis “elegidos” son:

1. Laura, de La vida gira.

2. Yeray, de Diario de un Playmobil. Y si lo hace con fotos ya será la pera!!

3. La Aspirante, mi ciberhija, de Justo a mí me tenía que pasar...

4. David, de Tertulias para perogrullos, por haberme endiñado un meme que aún tengo pendiente. No soy rencorosa, ojo, es por agradecimiento (ha colado?).

5. Alber, del blog Gay sin ley, por la misma razón que a David, y porque me gustaría saber alguno de sus sueños.

6. Sonia, del blog Y yo con estos pelos.

jueves, 8 de enero de 2009

Hacen unas risas?

Hace algunos años un amigo me pasó vía mail la "famosa carta del Estudiante Erasmus en Helsinki". Me reí hasta las lágrimas leyéndola y releyéndola una y otra vez. El ser humano es lo que tiene, solemos recrearnos en las desgracias... ajenas, por supuesto. Un buen día se la leí a mi Hermanísimo y ya fue la hecatombe, el despiporre general y es que la carta, leída e interpretada por él, ganaba mil puntos. O más. No paró hasta que le hice llegar una copia y la leía y releía cada vez que se encontraba con cuatro o cinco amigos, los que no podían parar de reír aún habiendo escuchado ya la historia en otras ocasiones.

Reir es fundamental. Es la mejor medicina que conozco. Así que he decidido colgar esto aquí, para que los que habeis disfrutado ya de estas letras, volvais a echaros unas risas y, sobre todo, por si aún queda alguien por ahí que no las conoce, para que se parta la caja leyéndolas por primera vez. La carta dice así:


10 de Octubre
¡Hola! ¿Cómo va todo por ahí? Yo fenomenal. Hace un par de días que llegué a Helsinki. Tendríais que estar aquí, ¡esto es una pasada! Bajé del avión y estaba nevando. ¡La nieve es tan bonita! Parece algodón blanco. Esto está precioso, todo nevado. Eso sí, aquí hace bastante frío, pero me he comprado un abrigo fenomenal. ¡Es tan calentito!

Ya estoy instalado en casa de Fruder. ¿Sabéis lo que me pasó? De camino aquí apareció por la carretera un reno. ¡Qué cosa más bonita! En mi vida he visto animal más majestuoso. Parecía sacado de un cuento. Al llegar aquí resbalé con el hielo bajando la maleta del taxi. ¡Ja ja ja! Está todo helado, ¡es tan divertido!

Decía que estoy en casa de Fruder. Me ha dejado un coche para que vaya todos los días a la universidad., ¿no es fantástico? Ayer por la mañana, cuando fui a sacar el coche del garaje, me encontré con que había nevado por la noche, y tuve que quitar el montón de nieve con una pala. ¡Era tan auténtico! ¡Me sentía Doctor en Alaska!

Esto es fenomenal, me encantaría que estuvieseis aquí. Os envío una postal para que podáis admirar el paisaje, que parece salido de un cuento de Dickens. Creo que me he reconciliado con el mundo. Besos.
Volveré a escribir.


20 de Marzo
Esto es una mierda. Estoy hasta los cojones de este sitio. Esto es como el infierno pero con el aire acondicionado a toda hostia. ¿Quién coño me mandaría meterme aquí? ¡Te lo dije, mamá! Aunque os parezca mentira, aquí el termómetro no sube de cero. ¿En qué cabeza cabe? Por cierto, ¿qué tal las fallas? Bien ¿no? cabrones… Aquí no hace más que caer nieve todo el puto día. ¿Qué digo nieve?; mierda blanca, porque esto es mierda blanca.

Esta mañana, después de media hora de intentar arrancar el jodido coche (se había helado hasta la dirección), abro la puerta y ¿qué me encuentro? Pues lo de todos los mismo putos días: una tonelada de mierda blanca. El médico me ha dicho que me deje de jugar con la palita, que como se me vuelva a enganchar la espalda me voy a quedar paralítico. Desde que hace un mes pequé un resbalón en el hielo (mierda transparente) y me saqué una vértebra del sitio, lo estoy pasando fatal.

Luego, de camino a la universidad, he atropellado un puto reno. El cabrón se ha cruzado sin avisar. El reno, en mi vida he visto animal más hijo de puta… Y encima, ¡que te crees tú que me lo he cargado! El cabrón ha salido por patas mientras yo me quedaba en mitad de la nada con el radiador reventado. Los veinte kilómetros andando por la nieve me han dejado bien jodido. Los mocos se confunden con las lágrimas que ruedan por mis mejillas mientras os escribo estas líneas. No sabéis las ganas que tengo de volver. Estoy hasta los cojones de este puto lugar. Tengo ganas de llegar a casa y quitarme la mierda de abrigo que llevo encima desde Octubre y que ya empieza a apestar. Un abrazo a todos. Os quiero.

PD: Estoy pensando en suicidarme.
La foto del reno la he tomado de www.zoosantillanadelmar.com

miércoles, 7 de enero de 2009

Aventura blanca

En Holanda hablar “del tiempo” es algo muy socorrido. Estás en la parada del bus, éste tarda en llegar, y ya saldrá alguien con el temita. Al menos eso decían los libros que tuve que estudiar. Llegas al gimnasio envuelto casi con mantas, al borde de la congelación, y qué es lo primero que escuchas? A alguien que te comenta (como si no te hubieras dado cuenta) el frío que está haciendo. Esta noche ha nevado. Poquito, pero lo suficiente para cubrir todo con un precioso manto blanco. Mientras me preparaba un café, Snake ha empezado a ponerse pesadito (diez kilos de gato dan para ponerse más pesado que una vaca holandesa, os lo aseguro) con que quería salir a la calle. Y yo que no, y él que sí, y yo que no, que hace un frío del demonio, y él que sí, que por mis bemoles que salgo. Ya os imaginareis quién ha ganado, no? Pues sí. Ha ganado él y por goleada. Le abrí la puerta pensando, ilusa de mí, que le dejaría estar un momento, y que una vez pusiese su patita en el blanco elemento volvería a casa echando chispas por el rabo. Nada más lejos que Cuenca! Este gato es un pelín sibarita y el agua fría, cuando más fría mejor, lo trae por la calle de la amargura. La de su cuenco tiene que ser de la nevera, por supuesto y ya que no me pide Solan de Cabras, que a ver dónde la iba a encontrar yo! Coges el cacharrín, te vas hacia la nevera y, como esté él delante, zas, empieza a escalar con sus patitas por la puerta del frigo hasta llegar casi al grifo, mientras emite unos sonidos que parece que ha estado un mes en el desierto, el muy exagerado.

El caso es que ha sido salir a la calle y ya se ha puesto loco perdido a chupar. Chupa que te chuparás se ha debido beber un litro. He intentado hacerle alguna foto y han salido todas como el culo, porque es que no le ha dado la gana de mirarme ni un segundo. Él a lo suyo: a chupar! Cuando empecé a notar que el frío se iba instalando en mis huesos le insinué (darle órdenes a este bicho es perder el tiempo) que habría que volver a casa. Me miró. Os juro que me miró, como diciendo, “vas arreglada, bonita, con lo bien que me lo estoy pasando!”. Y fue mirarme y salir por patas! Y yo detrás. Ven aquí y él que no. Y me miraba y avanzaba un poco más. Al final, con mucho esfuerzo y un temor tremendo a dejar las posaderas bien asentadas en el suelo, conseguí atraparle. Con él en el brazo me dirijo a la casa. Abro la puerta y zas, ahí está Chipie, que también quiere salir. Marujo!. Pero él no puede, no, no, así que con la pierna izquierda, cual Zidane en sus mejores tiempos, intento detenerle. Lo he conseguido, pero en medio de la jugada, Snake ha girado sobre sí mismo en mis brazos y ha salido como alma que lleva el diablo. 2-0 a favor del minino... y el día acaba de empezar. Así que ahí le he dejado, rascando frío y chupando nieve. Cuando vaya a por otro café ahí estará él, trepando por la puerta y poniendo cara de bueno para que le abra. Como si lo viera.

Al menos él ha conseguido sacudirse la vagancia extrema que tenemos este año en casa. A mí me está contando bastante más y es que con esta “frialdad” lo único que me apetece es ponerme cerquita del radiador y ver pelis, o echar partidillas al Mario, que me tiene enganchada hasta las lágrimas. Que yo pensaba que me había venido a vivir a los Países Bajos, pero no a Siberia. Coño!! Y todavía tengo que dar gracias, porque en el sur del país han llegado a los 21 grados bajo cero. Que se dice pronto, eh. En un zoo han tenido que guardar a los pingüinos. Que cuando lo leí me quedé muerta. Claro que no eran pingüinos polares, pero vamos, lees eso y cómo te quedas. Pues helado. Que no? Como se han quedado mis tiestos, pobrecillos ellos, que uno hasta ha reventado. Que parezco nueva!

martes, 6 de enero de 2009

Estamos de un vagoooooooooooo

Pues eso, que os lo puedo decir MÁS ALTO, pero no más claro: estamos vagos, y como muestra un botón, o dos, o tres. Hace tanto, pero tanto, tanto frío, que lo único que apetece es aposentar el culete en el sitio más cómodo de la casa y dejar que el tiempo pase.





domingo, 4 de enero de 2009

BLOG REVELACIÓN!!!




Como ya sabeis, he estado casi todo el mes de diciembre en España, alejada de internet y el mundanal ruido y dedicada, prácticamente en exclusiva, a disfrutar de la compañía (y la ingente cantidad de mimos que me dan siempre) de mis Papis. La vuelta siempre me traumatiza, pero si a eso le añadimos que hemos empezado año y que para esas ocasiones siempre me planteo millones de cambios, pues ya la tenemos liada. Dejando aparte mi sempiterna vagancia, que ya no puede servir más como excusa, la pobre, lo cierto es que todavía no he encontrado el momento de ponerme al día con los casi quinientos post que habéis escrito mientras yo me dedicaba a la vida contemplativa. Aún con esas, la generosidad de la blogosfera me deja sin palabras (a mí, que soy capaz de hablar hasta después de muerta). Si ayer “amanecía” con cuatro premios hoy me he “despertado” (no exactamente, porque esto acaba de ocurrir, y llevo unas cuantas horas despierta, pero permitidme el juego de palabras) con algo increible. Mi maestro, mi Amigo, mi ídolo bloguero, mi queridísimo Iago me ha otorgado el PREMIO AL BLOG REVELACIÓN. Premio personal, instransferible, que guardaré y exibiré como oro en paño y que me ha puesto la piel de gallina. Y no es para menos, esto es lo que ha escrito de mí:

“Bira irrumpió en la blogosfera en el mes de marzo. Y desde el principio lo hizo con mucho dinamismo y fuerza expresiva. Dice que bebió de mi blog y se animo al leerme a mi; si es así, creo que la blogosfera tiene una deuda conmigo impagable. Pero desde luego, es el típico caso de alumno que supera a su maestro. Tiene una facilidad para la escritura poco corriente. Sus post partiendo de cosas sencillas y cercanas como las flores de su jardín o sus gatos, llegan a tal intensidad que la emoción te salta a flor de piel. La belleza de la sencillez. Pero, además, se ha revelado como una infatigable escritora de relatos de viaje. Y esa vitalidad contagiosa la hemos sentido todos en sus inolvidables post africanos. Hoy cuenta con tal legión de fieles lectores que recibe los premios de cuatro en cuatro (y el gusto por los premios si que lo aprendió de mi, y lo aprendió bien, la muy jodida, jajaja).”

No es cierto todo lo que cuenta, ya sabeis que tiende a exagerar, pero leyendo sus palabras me veía desfilando por la alfombra roja, con un escotadísimo vestido plateado (en honor al maestro, of course) y cientos de manos veteranas aplaudiendo a la revelación del año! Joder, qué fuerte, cari!.

Y es que Iago es lo que tiene, que consigue emocionarme casi siempre. Y cuando no lo hace es porque estoy descojonada, casi cayendo de la silla, leyendo las mamarrachadas más disparatadas que mente humana puede imaginar. Creo que esa sabiduría de poder escribir de todo adoptando los más diversos estilos, pasando por la generosidad de la que hace gala, han hecho que le quiera tanto como le quiero y que, aunque nunca nos hemos visto las caras, sea uno “de los míos”. Ahora y siempre.

Cuando no leía mis posts ni mi familia, ahí apareció él, para agradecerme el haber pasado por su blog, y empezó una relación a la que no quiero imaginarle un final. Son estas las cosas que me hacen amar la tecnología. Todos estos aparatos no servirían de nada si detrás no hubiese personas maravillosas y yo he tenido la suerte de encontrarme con unas cuantas, entre las que (respetando lo presente), Iago ocupa un lugar privilegiado. No podía ser de otra manera. Ha sido (es) mi maestro, y con él nada me falta. He reído y llorado con sus post. Me he imaginado mil veces su cara, su voz... incluso intento imaginarme si en el mundo real tendrá la misma chispa que en la blogosfera o si será un tímido al resguardo del descaro que facilita el blog. Sea como fuere, y aunque nunca se crucen nuestras miradas, sé que es buena persona. Lo ha demostrado, y no sólo transmitiendo su sabiduría y contagiándome su amor por los premios, no, no. Por ello, Iago, te doy las gracias y espero seguir disfrutando de todo lo que escribes. Intentaré, además, que no tengas que arrepentirte de haberme concedido un honor tan grande!

Te quiero miles, roulo!