jueves, 3 de abril de 2008

Egipto, paseo final

En esta última (por ahora, porque me he prometido volver) entrada dedicada a Egipto recorreremos someramente los templos de Luxor y Karnak y nos iremos, cruzando el desierto, hasta Hurghada lugar al que fuimos para descansar de la denominada fatiga faraónica (la mismita que os he debido producir a vosotros con tanta entrada sobre el mismo tema. I'm sorry!).


TEMPLOS DE KARNAK Y LUXOR

Los dos templos principales de Luxor, Luxor y Karnak, se encuentran dentro de la ciudad y separados en la distancia por unos 4km, pero unidos en la antigüedad por un paseo de pequeñas esfinges con cabeza humana del que hoy se conservan unos cientos de metros a la entrada del Templo de Luxor.



Templo de Luxor.


Su entrada principal te deja ya con la boca abierta. Las dos estatuas sedentes de Ramses son impresionantes y están muy bien conservadas. Lo único que le falta es el obelisco gemelo al que queda, y que se llevaron los franceses. Si lo queréis ver, ya sabéis donde está, es el de la Plaza de la Concordia de París. Afortunadamente, nuestros amigos galos no se lo llevaron todo y aún hoy la entrada sigue siendo espectacular.





Una vez dentro, el templo es una sucesión de patios, cámaras y salas, todas ellas entre impresionantes hileras de columnas, en las que se representan diferentes historias con escritura jeroglífica, casi todas haciendo alusión a las victorias de Ramsés II sobre los hititas. Aquí, al igual que en otros templos que visitamos, no queda ni un solo resquicio sin trabajar. Absolutamente cada trozo de piedra encierra un relieve, una historia, una imagen. Una pasada!

Impresiona siempre, pero si tenéis la oportunidad de una visita noctura (como se suele hacer cuando se viaja con agencia), cuando está totalmente iluminado y su aspecto es una mezcla de fantástico y fantasmagórico, no os lo debeis perder. Es de una belleza indescriptible.




Templo de Karnak.



La primera de estas tres fotos es una de mis favoritas, pues dentro de las paranoias mentales que amueblan mi cabeza quiero ver en ella la representación del bien y el mal, que todos albergamos en nuestro interior, aunque pocas veces dejemos ver tan claro que tenemos una parte buena y otra perversa. Además el cielo se puso de mi parte y lució uno de sus colores más espectaculares. Sí, me encanta esta foto.

Y ahora, al grano. Al templo, dedicado a Amón, se accede a través de un paseo adornado con estatuas de carneros.


El nombre de Karnak se emplea para designar un vasto conglomerado de templos, capillas y otras construcciones en ruinas que pertenecen a diferentes períodos. Constituye lo que en egipcio antiguo se denominó Ipet-isut, "El más selecto de los lugares", el sitio principal en que se adoraba a la tríada tebana con el dios Amón a la cabeza, y hogar por el mismo motivo de varias divinidades "huéspedes". No hay otro lugar en Egipto que produzca una impresión más abrumadora y duradera que este aparente caos de muros, obeliscos, columnas, estatuas, estelas y bloques decorados.


El complejo puede dividirse en tres grupos, definidos por los restos de muros de ladrillo que enmarcan los recintos del templo. El mayor y más importante en el recinto central, el templo de Amón propiamente dicho (el mejor conservado). El sector septentrional pertenece a Montu, el dios local originario de Tebas, mientras que el de Mut queda al sur y enlaza con el recinto de Amón mediante una avenida de esfinges con cabeza de carnero. Una avenida, bordeada de esfinges, enlazaba Karnak con el templo de Luxor, y unos canales conectaban los de Amón y de Montu con el Nilo.

Encierra diferentes estilos, lo que podemos apreciar por ejemplo en las columnas, colosales y de formas diversas, con capiteles que, según la época, reflejan la distintos motivos de la naturaleza o de las divinidades.

Karnak es el conjunto de edificios religiosos más vasto del antiguo Egipto, y es que aquí se alzaba en otros tiempos la gran Tebas, la más famosa de las antiguas ciudades de Egipto, y todos los faraones que vivieron aquí, uno tras otro, fueron engrandeciendo y transformando el templo.

El gran obelisco, que aún hoy domina el Templo de Amón, está ligado al culto solar, y se debe a la reina Hatshepsut, quien se autoproclamó hija del dios Amón, logrando convencer a los sacerdotes de la época que el mismo dios germinó el vientre de su madre. Hay muchas historias como esta, y todas se recogen en las paredes y columnas del templo, donde hasta el ultimo rincón esconde un relieve. Es mucho lo que hay que andar e imposible pretender verlo todo.




Cabe destacar también una estatua gigantesca del escarabajo sagrado, que se remonta a Amen-Hotep III, símbolo y dios del amanecer. Según los egipcios trae suerte rodearla tres veces, así que no os extrañéis si veis a los turistas dando vueltas como locos. Y, si no recuerdo mal, también hay un número determinado de vueltas que hay que dar, según lo que quieras sea matrimonio o descendencia. Yo, por si acaso, me quedé mirándolo muy fija, pero sin osar a dar vuelta alguna, que esas cosas las urde el demonio...



LUXOR

700km al sur de El Cairo, a orillas del Nilo se encuentra Luxor, la antigua Tebas, una auténtica "Meca viajera", donde se reúnen las mayores joyas del pasado faraónico: Valle de los Reyes, Valle de las Reinas, las necrópolis tebanas, los templos de Luxor y Karnak, etc. Su riqueza artística es inmensa. Hoy, además, es el punto de partida para los cruceros turísticos que recorren el Nilo hasta Aswan.

Saliéndose del paseo principal, destinado a turistas, todo cambia y se vuelve más oscuro, más sucio, y más pobre, las calles no están asfaltadas, y nos encontramos con la realidad de la población egipcia, que lucha como puede para sobrevivir y combatir la pobreza. Es la parte, digamos, menos agradable del país aunque, sin duda, la más humana. Las gentes son tremendamente amables y curiosas (lo primero que harán es preguntarte de dónde eres, y si tu país les es conocido, rápidamente empezarán a disparar nombres de futbolistas famosos).
Me quedé maravillada de sus rasgos, de la belleza de muchos egipcios (y egipcias of course), por eso me gustaba tanto cuando me preguntaban si era de allí (no tengo abuelas, así que agradezco todas las flores que la peña esté dispuesta a echarme).
Sin embargo, he decir que me decepcionó mucho la evolución que ha tenido ese inmenso país: de una civilización tan avanzada como fue la de la época de los faraones (no hablamos de derechos humanos, que por entonces ya sabemos que no había, sino de su capacidad para la arquitectura, el relieve, las obras civiles, los templos, etc), al Egipto de hoy donde en el momento en que pongas un pie fuera de las rutas "marcadas" para turistas, te vas a encontrar una pobreza abrumadora. Se me saltaban las lágrimas cuando alguien me pedía un bolígrafo para sus hijos, porque ignorante de mí, desconocía cómo vivían y no me llevé nada que dejarles. En el viaje que preparamos para este año, que también será a África (si Dios y el demonio no lo impiden), espero que esto cambie, aunque tenga que volver en bragas!
Está claro, por otro lado, que están hechos para el comercio, y prácticamente cada puerta es un pequeño negocio, y cada barrio un bazar. Es una experiencia muy agradable perderse por sus callejuelas.


HURGHADA

Hurghada es una interminable sucesión de hoteles y complejos turísticos, creados de forma artificial en medio de la nada. Nosotros llegamos allí en un convoy que atravesó el desierto y se hizo eterno, y encima, semiacojonados, pues íbamos rodeados, literalmente, de militares para nuestra protección (que yo pensaba: a estos se les va la olla y aquí no queda ni Cristo).
Nos alojamos en el Melià Pharaoh que está muy bien, de hecho, lo único destacable de la zona (aparte, por supuesto, del Mar Rojo). Mucha piscinita, unos jardines inmensos llenos a rebosar de preciosas flores, todo muy cuidado, muy limpio y, tal vez por la fecha (estuvimos allí en enero), sin saturación; con su playa particular (camellos de cuatro patas incluidos).

Es como un Benidorm llevado al extremo: todooooooooo está preparado para el turista, de ahí que no se vean muchas mujeres, pues mientras ellas permanecen en sus pueblos, son los hombres los que se dedican a trabajar para los turistas, en tiendas, hoteles, bares, restaurantes..., eso sí, se me cayó el alma al suelo cuando, en pleno paseo, nos sorprendió la imagen de una “matanza” de un cordero, cabrito o vete tú a saber qué era aquel bicho. Terminado el Ramadán tocaba fiesta, y para ello, qué mejor que degollar al bicho en plena rua? Increible.
De aquí apenas pongo fotos porque paso muchísimo de que os deleiteis viéndome en biquini... eso a pesar del choteo que nos traíamos, pues por cada sitio al que íbamos los hombres, que serán muy respetuosos y recatados con sus mujeres pero que a las occidentales nos hacen una radiografía de aquí te espero, no paraban de piropearme y de decirme si era egipcia... Sería por mi más que obvio parecido con Cleopatra? Juas!!.
Lo que más me gustó fue el zoco. Me encantan esos lugares llenos de mil colores y olores, no todos agradables bien es cierto, de cosas raras, de gente amable que podría llegar a venderte su alma si eso fuera posible,... y el que te vayan piropeando por la calle, pues hombre, lo hace todavía más agradable. Y es que yo creo que el hombre hetero occidental ha perdido el gusto por la carne, pero los egipcios lo mantienen intacto. Ya lo decía mi Abuela: "Donde hay masa, es donde mejor se pasa!", o aquello bien sabido que no hay mejor espejo que la carne sobre el hueso... y todo ese sabio refranero castellano que nos sabemos las gorditas para justificarnos, vosotros sabeis!.

















En el zoco, con los vendedores de especias.


En uno de los bares del hotel, fumándonos unas shishas, buenísimas, por cierto.

La playa privada del resort, con sus camellos y todo.



3 comentarios:

Thiago dijo...

Jopetaaaa! Es un paseo extraordianrio, tu post no es un post, es todo un libro de viajes... Las fotos espectaculares, te lo digo en serio, sobre todo pq me dan una ... (a ver si lo digo bien) perspectiva ? distinta. Siempre había visto las fotos tipicas y no asi. Me ha gustado especialmente la del paseo de corderos, la de los obeliscos pq son tb. distintas y .... la tuya y tu chico fumando, jajaja

Cari, te estas pegando una panzadad en mi blog, jaja te va a dar algo, eh..

Marcos ha tenido que restringir la entrada a su blog, pq le pillo su padre... Es una historia martir, te hago un resumen:
"Marcos es gay y se tuvo que ir de casa, a vivir con la familia de su mejor amigo: Adri que era hetero aunque guapisimo... que además tiene una hermana peke Iria y otro peke que no me acuerdo del nombre, Asbel, creo.

Poco despues de la llegada de Marcos a esa casa, se muere la madre de Adri. y al año justo, se muere Adri en el quirófano en una operación de corazon.... Alli tienes a Marcos viviendo con su familia adoptiva y su padre persiguiendolo, lo secuestro y se lo llevo a Roma con Los Legionarios de Cristo.. Bueno, todo un número...

El blog de Marcos es uno de los mas queridos por toda la peña, espero que me entiendas la explicación, que asi contada suena como a novelón, pero su blog es super tierno y sincero.. una pasada... Yo para Iria era "el nene del Bo naranja" y le dediqué un cuento que se llama "A Iria" creo o algo asi... jaja

Bezos y gracias por tus comentarios, me estas llenando el blog de huecos, jajaja

BIRA dijo...

Thiago, G R A C I A S !! Me llena de orgullo que alguien a quien admiro diga cosas tan bonitas de mi trabajo. La verdad es que a mí esas fotos también me gustan mucho. Como te dije, en los álbunes las hay buenísimas, pero he de reconocer que no es difícil hacer buenas fotos cuando la material prima es como la egipcia. Siempre me quedará la pena de no haberle pedido permiso a una mamá y su nena para hacerles una foto. Nunca había visto, ni veré unos ojos igual.

Confieso que he tenido que hacer un kitkat con tu blog, porque ya me dolían los ojos de tanto leer. Y también porque no quiero acabarlo así como de repente, porque después, qué leo??

No te he dejado todos los comentarios que me venían a la cabeza porque tampoco es plan ser pesada, pero de verdad, me encanta lo que escribes.

Joer, qué fuerte la historia de Marcos. Espero que todo esté arreglado y consiga ser feliz, que se lo merece, coño!!

Al cuento de Iria no he llegado, pero todo se andará. Eso seguro.

Por cierto, lo de “llenarte el blog de huecos” no es nada malo, no? Es que, como soy nueva, a ver si estoy metiendo la pata (como hago siempre, por otra parte).

Un besote, salao!

Unknown dijo...

holaaaaaaa¡
lo dicho,que me voy contigo a Egipto para que me enseñes todo eso que tú tan bien describes(eres una super cuentista en el mejor sentido de la palabra)
besazos de los buenos