Descubierta por Cristóbal Colón, debe su nombre al hermano del conquistador, Bartolomé Colón. Fue sueca durante un siglo. Así, su herencia sueca, su presente francés y la influencia de los norteamericanos hacen de este reducto francés una curiosidad de cultura y naturaleza prácticamente intacta, convirtiéndola en un lugar paradisíaco que, desde hace años, es un suntuoso oasis para los ricos y famosos. La bellísima Beyoncé, Uma Turman, Cindy Crawford o Pe, la eligen habitualmente como lugar ideal para adquirir un estupendo bronceado en playas paradisíacas como la de Saline o St. Jean. Además, a pesar de su tamaño la isla es uno de los lugares más exclusivos del planeta a la hora de hacer shopping.
En medio de un azul inmenso, aparece una montaña en medio del mar. Cuesta ubicarla en los mapas con sus apenas 25 kilómetros cuadrados, a pesar de que es la meca del turismo privilegiado de playa. Gustavia es la capital, y debe su nombre al rey Gustav III. Vista desde algún mirador, ofrece uno de los conjuntos más atractivos de estas islas, con todos sus tejados rojos entre el verde tropical de sus jardines. Constituye en la actualidad un pequeño pueblo bien restaurado, con mucho colorido y con un toque un tanto mágico, salpicado aquí y allá por tiendas de las más exclusivas marcas del planeta.
Alquilamos un taxi para hacer un tour por la isla y disfrutar de las increibles vistas, las calas, las mansiones (entre ellas, las que tuvieron en la isla el increible Nureyev o Michael Jackson). Durante el “paseo” pudimos observar que St. Barth es un pequeño jardín en medio del mar, una versión tropical de la Costa Azul, un diminuto pedazo de chic francés bañado por el sol más brillante.
El paisaje está definido por pequeñas villas desperdigadas por las colinas, hoteles de lujo formados por cabañas escondidas bajo las palmeras de playas tan pequeñas como encantadoras, y el puerto de Gustavia, con sus increibles veleros y sus yates de escándalo (además era el día de S. Valentín con lo que sobre las cubiertas de estas “mansiones flotantes” destacaban inmensos ramos de las flores más exquisitas, que hicieron que los dientes se me pusieran tan largos de la envidia que llegué a hacer estrías en el suelo).
Se diferencia mucho de las islas que la rodean. Allí está prohibido construir edificios altos, los hoteles no suelen tener más de cincuenta habitaciones y los casinos brillan por su ausencia, aunque se dice que allí se encuentran los más excelentes restaurantes del Caribe (todos ellos bastante caros, por cierto). La playa más famosa de la isla es la de St. Jean, con varios restaurantes y hoteles de categoría, pero hay muchas más, como Anse du Gouverneur, adonde se llega por una tortuosa carretera, o Anse de Grande Saline.
13 comentarios:
"Amigo" gardagami,
cuando quieras joder a alguien, paga por ello si no consigues obtenerlo gratis, pero déjate de molestar a personas que no conoces con tus enlaces de morondonga. "Gracias" por tu comentario, pero prefiero que no me lea nadie a que lo hagan malajes como tú. Espero no volver a verte por aquí.
uy madre!! y esa contestación?? qué te decía el personaje?? un besín
Pues no decía nada, reina. Simplemente enlazaba a algún sitio (vete a saber cuál) en el que salía una ventanita avisándome de que el computador estaba infectado de no sé qué.
Odio a la gente que lo único que hace en esta vida es intentar tocar los bemoles a los demás.
Igual soy una paranoica y me he pasado o no era lo que yo pensaba (es que ni terminé de leer) pero ni puta gracia me hacen estas cosas, oiga.
Un beso reina (ahora ya más calmada).
Ah Dios mío... no quiero ir a trabajar hoy, quiero tirarme en esas playas!
Que sitio tan bonito, y me encantan tus fotos.
Besos!
yo mañana no voy al H&M(por lo menos de mente)y me piro a las islas esas a pintar como Gauguín(versión moderna)
Ay maldita Primitiva que no quiere tocar¡
abrazos como garbanzos
Pues nada, Pilgrim y Haquiles de mi corazónnn, que podeis poneros a rezar (a Buda o quien tengais a bien) para que me toque la una buena lotería y prometo llevaros a los dos. Anda que no nos lo íbamos a pasar bien ni ná, jesús, malita me pongo de pensarlo.
Besotes y muchas gracias por pasaros (que me hace una ilusión del copón!).
Cari, muy bonitas fotos y muy interesante, no tenía ni idea de este sitio, claro que siendo tan exclusivo no creo que les interese la genet como yo, jajaa.
me encanta lo de Gustavia, que nombre tan gracioso, parece de película de esas americanos de príncipe lejano se enamora de estudiante americana. jajaj Príncipe de Gustavia.
La verdad es que existe el paraíso, pero está en este planeta...
Bezos
jaj Bira, que curioso y que coincidencia...! Te estaba dejando un mensaje para ti, justo en el blog de Gwathadan, cuando de repente mi MSN me avisa: Mensaje de Bira.. jaja pero en el mismo segundo, eh...!
Bueno, ya te lo digo allí, pero gracias por molestarte en ir a mirar, como dije allí mismo: "Pocos son los que se molestan en ir a ver un blog recomendado y menos los que lo reconocen" Bezos, wapa.
¡Hola!
Jo, muchas gracias por visitar mi blog y leerme. ¡Me alegra mucho que te haya gustado! Espero que sea así por mucho tiempo, jejeje.
Menudo viaje parece que has hecho. ¡Y vaya fotos! Así me gusta, disfrutando de las cosas bellas que nos da la vida, que son muchas :-)
Un abrazo grandote :-)
Querido Gwathadan, el placer ha sido mío, porque de verdad lo que he podido leer de tu blog me ha encantado. Prometo seguir leyendo!!
Muchas gracias por pasar y por dejarme un comentario (como no tengo muchos, cada uno me lo tomo como algo muy especial).
Un besazo
si tienes 11 comentarios sólo en una entrada!!! de qué te quejas perraca?? pues yo acabé ahora de aliñarme y tal y a ver si bajamos a "desayunar"unas alitas de pollo, que hemos encontrado un sitio que están de muerte!!! ñam ñam....uin besazo!!!!
Ahora mismo me encuentro en uno de los resorts de St Barth, en Eden Rock. Estuve en abril, recorriendo las Antillas menores en un yate privado y decidimos volver porq merece la pena. EL eden real.
Un saludo a todo
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